Se trata de una a encuesta realizada por el Centro de Estudios Nuevo Milenio, que consultó a 500 vecinos distribuidos en 8 barrios del distrito.
Un 94 por ciento dijo estar de acuerdo con la iniciativa, en tanto tan sólo un 6 por ciento manifestó su rechazo a la posibilidad que los porteños puedan enterrar o cremar a los cuerpos de sus mascotas.
El relevamiento también constató que un 68 por ciento de los consultados ya sufrió en alguna oportunidad la muerte de un animal querido, y un 76 por ciento estaría a utilizar ese cementerio ante una nueva instancia similar.
Compartimos la repercusión que tuvo el estudio en los medios: La Nación